Al enterarse, en el pueblo desfilaron cientos y cientos de personas a llevarle flores, veladoras y dinero al traste, ¿quién está mal? El que ve una mancha de aceite o mugre pegada, o el que ve a una virgen cargando un niño con un rosario y un tipo incado sobre unas rosas…quién esta equivocado, si la gente está convencida, las cosas si las crees pueden pasar, los milagros existen y en estos tiempos de crisis, violencia y demás, lo que hace falta es creer.
Sigo chingando con lo de la capacidad de asombro, que chido es asombrarse y esa gente se asombra ,el sacerdote que está a dos cuadras, ni la fue a ver, porque dice que cómo se le aparece a esa gente que no va a la iglesia, ni a mi se me aparece, se atrevió a decir. Está cabrón, ahora resulta que para que se te aparezca algo tienes antes que comulgar, eso de la religión es muy complicado, los católicos ven como muchos de sus fieles se van con la santa muerte o a otras religiones y tiran a loca a gente que se junta a rezarle a la Virgen del Rosario, ya sea que esté en un sartén o una corcholata, no importa donde sea pero tienen fe, y mucha más, que el párroco de su iglesia…
Un familiar me contó la historia, pero necesitaba, en verdad necesitaba, ver la imagen de los chiquillos buscándole forma a una mancha en la sartén.
ResponderEliminarSaludos.
El México mágico, lo que hace la fe, las ganas de creer en algo, tiene razón Duff, cuando dice que hay que creer en algo, yo por eso... creo que me haré otro café, saludos grillito.
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