Primero ir a retratar a un par de homicidas que después de robar, matan y queman a sus víctimas a sangre fría por unos cuantos pesos; después cubrir la misa con los restos del Padre Martín del Campo, próximo santo si lo decide el Vaticano. Un día de contrastes...
Y luego que nos digan... que trabajo más tranquilo, y más decidido tienes!!
ResponderEliminarDecide quien nos paga, sino de tranquilo nada.
Te felicito por la fuerza, que eso no te falte nunca.
Un abrazo
Gracias Penélope, no es un trabajo tranquilo pero no me imagino de burócrata detràs de un escritorio 8 horas al día, saludos...y gracias por comentar.
ResponderEliminarEl periodismo es crudo y constrastante!
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